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LA TEORIA INTERVALICA
Saludada desde su aparición como "un gran descubrimiento" por las más altas instituciones musicales, la TEORIA INTERVALICA es el nuevo paradigma de la música.
La teoría interválica supone una verdadera revolución para la enseñanza de la música, así como para la armonía, la composición, la interpretación, la musicología, la informática musical, la investigación, etc.
El descubrimiento de la teoría interválica ha provocado un cambio de paradigma, un cambio de 'chip' en la manera de pensar la música, ya que no se trabaja con notas sino con intervalos.
A esta insólita simplicidad por un lado, se suman, por el otro, unas posibilidades tan ilimitadas como inimaginables, a raíz de haber conseguido, por primera vez en la historia, formalizar la música, es decir, fusionar la música con la matemática. De hecho, cualquier otro intento que se haga para unir la música con la matemática, producirá un resultado equivalente a la teoría interválica, porque la matemática es sólo una, siempre la misma, válida universalmente. Tan grande es la generalidad de la teoría interválica.
Toda la música compuesta hasta hoy con las doce notas tonales representa un minúsculo grano de arena dentro del inmenso universo sonoro abierto por la teoría interválica. La aparición de la TEORIA INTERVALICA nos ha trasladado, de repente, desde un final agotado de la historia de la música hasta los albores de una nueva era interválica en la cual las ilimitadas herramientas de la matemática se incorporan a la música, encontrándonos actualmente en un escenario que, a este respecto, bien podríamos llamar como de prehistoria interválica.
La TEORIA INTERVALICA ha sido descubierta por el gran pianista, compositor y escritor SYDNEY D'AGVILO. Es la segunda teoría musical --después de la teoría tonal-- que se conoce desde hace 2.500 años.
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